imagen la Virgen de Andacollo (google)Marzo de 1934 fue un mal año para todo el norte chileno, aún afectado por la gran crisis ecónomica mundial y por la creación del salitre sintético alemán. En ese mes y en ese año se sucedían las lluvias en lugares donde no acostumbraba a caer agua y eso originó aluviones de diversas intensidades en las oficinas salitreras del interior de Antofagasta.( de propiedad de The Lautaro Nitrate Co, compañía inglesa que se hacía "la América" a costa del nitrato chileno y del trabajo y el tratamiento inhumano a que sometían a los trabajadores del salitre.)
El aluvión de mayor intensidad que ya inundaba toda la pampa, pasó por Baquedano con su río de lodo y piedras, sembrando el asombro de los habitantes de nuestro pueblo. En esos tiempos se construían viviendas a base de ADOBES que apenas resistían las fuerzas del aluvión. Cuesta imaginarse cuántas casitas destruyó y cuántos animalitos, enseres hogareños y de trabajo se llevó a su paso este aluvión. Tan gordo fue el comportamiento del aluvión que se debió suspender el tránsito de los trenes a Calama a causa de los serios daños a las vías férreas.
Los pampinos y baquedaninos en especial se encomendaban a la Virgen de Andacollo para que les ayudara por los daños provocados por el aluvión, ignorando que más al sur, otro aluvión dejaba prácticamente sepultado en barro el mísmiso pueblo de Andacollo, donde está el santuario de la Virgen.
(concretamente el 25 de marzo pasó el aluvión por Copiapó y Andacollo y otros en la zona central del país. Datos conseguidos en "Testigos del siglo XX", del Mercurio de Antofagasta)
Saludos de PAMPINA
