sábado, 3 de noviembre de 2012

Recuerdo de un casamiento

Fue como una fiesta de todo el pueblo, recuerdo. Todos esperábamos con alegría sincera que todo saliera bien...y cómo no iba a ser motivo de alegría y de buenos deseos si los novios eran muy queridos por todo el pueblo?. Ella había sido Reina de la Primavera el año anterior y era una belleza nortina de sonrisa enorme que repartía dulzura...él había sido su príncipe en la fiesta de coronación y novio desde siempre...un moreno de frente amplia, guapo y bien plantado con  modales de noble de pueblo pobre.
Cuando ella salió de su casa vestida de novia en dirección a la capilla en el otro lado del pueblo nos fuimos todos los niños y los jóvenes del pueblo a esperarles a la salida porque la capilla era pequeñita y apenas si cabían los familiares y los amigos de los novios. Además de casarse también bautizaron a un bebé del cual ellos fueron los padrinos. Qué fiesta fue aquélla! Cuando Elisa y Néstor salieron convertidos en marido y mujer los jóvenes les tiraban arroz  y nosotros, los niños gritábamos en coro: "Padrinito cacho, tírale la cola al macho" (una costumbre chilena de entonces) y el padrino tiraba monedas al aire que nosotros nosotros recogíamos en el suelo y nos llenábamos de tierra. Sacamos todos varias monedas porque tanto el novio que era padrino del bebé tiraba monedas y también lo hacían los padrinos de los novios: fiesta de monedas por partida doble!
Recuerdo haber estado un rato en la fiesta en casa de la novia junto a las mujeres de mi familia. Una de mis tías era una de las amigas más cercana de la novia y había sido su dama de honor cuando Elisa fue elegida reina el año anterior. 
Cuando fue reina Elisa y sus damas lucían blancos vestidos blancos de reina y de princesas...que eran un sueño y que me dejaron soñando por mucho tiempo. En la fiesta del casamiento tengo que haber estado largamente con la boca abierta admirando la belleza de la novia y su traje blanco modelo de la época y seguramente mandado a coser en Antofagasta a la medida..Seguramente, como todas las niñitas de mi edad estube pensando en cómo sería el traje que yo llevaría el día de mi boda.
En esos tiempos las chicas se casaban a los 16-17 años y se consderaban casi como solteronas a las que no se casaban antes de los 18-20 años.
Es el único matrimonio que recuerdo con esos pocos detalles de mis tiempos baquedaninos...y que suerte que todo no se ha esfumado de mis recuerdos. Algún día preguntaré a mi tía o a mi mamá si recuerdan más del casamiento o de las costumbres en los casamientos pueblerinos para escribir algo más sobre eso...por ahora me conformo con escribir lo que yo recuerdo.
OBS: la imagen fue encontrada en www.google.com y no tiene nada que ver con la novia de esta historia
Un saludo para todos los que me leen y no olviden que pueden dejar comentarios aquí mismo o escribirme a mi mail : pueblo.baquedano@hotmail.com 
Saludos de PAMPINA.